Durante los meses de noviembre y diciembre, el académico de la Universidad Estatal de Minnesota (USA), Michael Rutkowski, ha estado de visita en el Instituto de Física PUCV. Viajó a las Torres del Paine de vacaciones, le gustó Chile y la rutina de trabajo en el Campus Curauma. Junto al profesor Raphäel Gobat, se encuentra investigando la formación de estrellas en galaxias de redshift intermedio. Su objetivo durante su estancia es redactar proyectos y postular a la observación terrestre en alguno de los telescopios más importantes que aloja el país.
“Chile tiene los mejores telescopios terrestres del mundo”, partió afirmando Michael. “En el hemisferio norte no podemos acceder a los cielos que tienen acá. La idea de mi visita es investigar las galaxias que me interesan desde aquí y resultó que al profesor Raphäel Gobat le interesa lo mismo. Coincidimos y nuestro objetivo ahora es producir propuestas o, en su defecto, estructuras de propuestas que nos permitan postular a la ESO o al NOIRLab”.
La investigación
Michael Rutkowski comentó que está particularmente interesado en “galaxias quiescentes (e.g., como las galaxias elipticas) que son realmente viejas, pero no tanto. La evidencia señala que alrededor del 15% más o menos de estas galaxias han desarrollado formación estelar recientemente”. El académico explica que esta información fue encontrada a través de observación ultravioleta. Lo interesante de analizar para la dupla académica, es el “efecto del entorno al introducir potencialmente gas prístino en estas galaxias y cómo afecta esto a la formación de nuevas estrellas, o afectó a las que se formaron hace poco tiempo”.
Los telescopios instalados en suelo nacional permitirían “medir redshift espectroscópicos muy precisos de las galaxias así como caracterizar sus poblaciones estelares. Si confirmamos que se están formando estrellas, significa que hay gas molecular frío. Si hay, por ejemplo, un objeto más pequeño rico en gas en el entorno, entonces ese puede terminar dentro de la galaxia quiescente a través del proceso de fusión”, explica. “Estas galaxias están mucho más ‘apagadas’ que la Vía Láctea, pero al haber una alta probabilidad de interacción gravitacional, ya sea una fusión o similares, se puede pensar en ellas como algo parecido a Andrómeda”.
Esta investigación también permitiría, en perspectiva, seguir indagando en las fases del universo local. “Si la Vía Láctea es hoy una galaxia madura, ¿qué aspecto tenía cuando era adolescente? ¿Qué aspecto tenía cuando era un niño pequeño o un bebé? Las galaxias que estamos investigando al parecer ya pasaron por eso, son galaxias “aburridas”, pero eso no es lo que parecía hace 10 mil millones de años. ¿Cómo aplicamos la astrofísica para entender esa evolución? Eso es en lo que nos estamos centrando”.
Su paso por Chile
Para el académico es su primera vez en América del Sur. La mayor parte de su investigación la ha desarrollado con telescopios espaciales, en particular ultravioleta, por lo que no ha tenido necesidad de visitar esta parte del mundo. En la búsqueda de respuestas, los telescopios terrestres ofrecen una alternativa más que relevante. Eso sumado al cielo de Chile, son el combo perfecto para justificar su visita.
“Nunca había estado acá. Aproveché de viajar a Punta Arenas a ver pingüinos, visitar las Torres del Paine y me devolví a trabajar. Esta ciudad es preciosa. Me estoy quedando en un Airbnb en Viña del Mar, tomo el autobús con los estudiantes en la mañana y vuelvo en la tarde. La he pasado muy bien”, comenta Michael.
El grupo de astrofísica del IFIS ha sido muy importante en su visita a la PUCV. “Rara vez tenemos la oportunidad de hablar de astronomía en la universidad donde yo vengo. Acá hay un grupo activo, cuatro o cinco personas con quienes puedo tener conversaciones en el almuerzo sobre la vida, pero también sobre la Ciencia. Ha sido muy agradable. Espero sigamos colaborando”.